dijous, de setembre 20, 2007

La Flaqueza Del Bolchevique.


En el momento actual, apabullada por los medios de comunicación, que ora dan el coñazo para que uno vaya a ver la película sobre ese cursi pretencioso de Beethoven, ora beatifican a cualquier macarra anglosajón muerto por sobredosis aunque no supiera cómo se cogía una guitarra, la gente no se atreve a decir lo que piensa de la música.

Es jodido mantener que lo que hacía Mahler y lo que hace Mick Jagger sean la misma cosa, pero uno se da cuenta de que no se puede decir nada contra ninguno de los dos y la mayor parte de las personas dan en pensar que no tienen gusto y más les vale callarse o repetir lo que diga la tele o la prensa.


Reconozco que he padecido como cualquiera esa mordaza, y que alguna vez he intentado sublevarme mi interlocutor me ha arrojado encima una tonelada de consignas oficiales y casi me he quedado sin argumentos. Digo casi porque siempre había uno, que me guardaba y ahora ya no me importa enseñar: la única música que vale es la que me emociona, y la música que me emociona es la música que a mí me sale de los cojones que me emocione.

(La Flaqueza del Bolchevique. Lorenzo Silva, 1997)

2 comentaris:

Animal ha dit...

M'estan venint ganes de llegir-me el llibre.

vdbdc ha dit...

Al contrari del que és habitual, la pel·lícula és millor.
Salut, V.